Tras 4 años de gestación (sin exagerar) os presento encantada pero con cierto nerviosismo a Jorge. Un día, un amigo mío me regaló un libro de Ken Robinson (experto en creatividad y educación): «The Element». Gracias Manuel. Tuve la impresión que este buen señor Robinson había escrito su libro para mi… El libro habla de la importancia en la vida de encontrar tu elemento para poder sentirte vivo y realizado. Una vez encontrado tu elemento (que no es poco) es igual de importante poder encontrar tu tribu. Fue una revelación: el hecho de que soporte mal (y cada vez peor) la presencia de mis compañeros en general no significa que me he vuelto antisocial sino simplemente que estoy en una tribu que no es la mía porque el elemento que me da de comer (reconozcámosle al menos esto) no es el mío! La probabilidad que seas tu y no otro que esté en este planeta es tan pequeña que la vida, que eligió que fueras tu y no otro, merece al menos que elijamos vivirla a nuestra manera. Desgraciadamente hoy en día el dinero es el principal objetivo que la mayoría de personas persiguen, tal los simios sus cacahuetes (algunos criticarán este comentario cuando vean los precios de mis obras…) y muchos renuncian a vivir SU vida para unirse al rebaño de ovejas que sale a pastar. ¿A quién le importa si te gusta o no la hierba? Pués aqui estamos, Jorge y yo, listos para salir en busca de nuestra tribu….listos para ser libres.